Ruta de las patatas bravas en Vilanova i la Geltrú.
¿A quién
no le gusta las patatas bravas en
su mayor esplendor? En Vilanova i la Geltrú tienen algunas variedades de este
suculento manjar.
En
este caso me gustaría reflejar un pequeño párrafo antes de empezar de
wikipedia:
“El origen de este plato no está muy claro;
hay quien lo atribuye a «Casa Pellico» y otros dicen que se empezó a
servir en «La Casona», ambos bares madrileños y ya
desaparecidos. Lo que sí es cierto, es que fue sobre el año 1960 y que las
colas alrededor de estos dos bares sólo para probar las patatas bravas fueron
míticas. También existe mucha controversia sobre los ingredientes de
esta salsa; básicamente se diferencian en dos vertientes, aquellos
que defienden la presencia del tomate y otros que opinan que no debe llevarlo
y que su color se debe a la presencia del pimentón.”
Aunque
todos hemos crecido rodeados de ellas, ninguno podríamos decir cual es la
receta de esa salsa que realmente se podría proclamar como la primera o
auténtica.
Por
toda España las sirven con una salsa de tomate picante sin nada más, por
algunas zonas con una salsa “All i Oli” con un poco de pimentón, en otras,
mayonesa con salsa picante especial y así puedo seguir hasta que me duerma…
En
Vilanova i la Geltrú tenemos todas las variantes y la verdad que es bastante
difícil conocerlas todas, pero aquí os dejo algunas de las más conocidas y
otras muy sabrosas pero menos conocidas.
Todos
los que son de la ciudad conocen sí o sí las bravas del “Genil” y del
“Giraldillo”, ya que son las que nos han alimentado gran parte de nuestra
historia, pero hay algunos bares donde te pueden sorprender un poco más y dejar
las tradiciones un poco atrás.
En
esta visita patatera hablaremos aparte de estos dos conocidos locales también
del “Sa Calma” y del “Bar Pedralbes” más conocido como “La Chata”. Dos
establecimientos desconocidos por muchos pero con el producto estrella que no
deja indiferente a quien las cata.
“Sa Calma”, Passeig del Carme, Vilanova i
la Geltrú.
Patatas Bravas @ “Sa Calma”, Passeig del Carme, Vilanova i
la Geltrú, Barcelona.
En
el mítico Passeig del Carme de Vilanova i la Geltrú nos encontramos con este
hermoso lugar con sus vistas y su actitud positiva hacia el comercio de la
hostelería. Un establecimiento donde dos personas de lo mas amigable nos
aderezan con sus tostas y tapas la mejor cerveza de grifo de la zona y sus
espectaculares patatas bravas cocinadas a ese punto estupendas que tanto nos
gusta, y con el picante adecuado para que grandes y pequeños podamos
saborearlas. Su salsa, mas parecida a una “Salsa Rosa” que a la de tomate
tradicional, te deja un sabor y una satisfacción completa, cocinadas por orden
y servidas en una buena cantidad, ideales para compartir, una salsa diferente
para lo que la zona está acostumbrada, pero muy aconsejable para limpiar
impurezas del pasado. La ración cuesta 5,00€ y es ideal para compartir en su
terraza y disfrutar del día sea soleado o no.
“Bar Pedralbes” o “La Chata”, La Collada,
Vilanova i la Geltrú.
Patatas Bravas @“Bar Pedralbes” o “La Chata”, La Collada,
Vilanova i la Geltrú, Barcelona.
Uno
de esos bares que solo relacionamos con currantes y en los que muchas veces nos
equivocamos al no entrar. Regentado por la “Chata” y casi siempre su familia,
solo el fin de semana te dejarán saborear sus grandes recetas de tapas y sus
suculentas patatas bravas. Un lugar con mucho carisma y cariño en lo que hacen,
porque para hacerlo mal ya hay otros. Sus patatas bravas que más de una vez
salen de su huerto, las acompañan de una salsa “All i Oli” con algún aderezo ya
sea pimentón u otra cosa que hace que también tenga el color rosa conocido.
Unas patatas bravas servidas con el carisma de su cocinera y dueña que no dejarán
indiferentes a ninguno que quiera disfrutarlas. La rac
ión
sale a unos 4,00€ y lo puedes acompañar con un botellín bien frío y con las ganas
de disfrutar tranquilo de su terraza cubierta.
“El Genil”, C/Jardi nº77, Vilanova i la
Geltrú.
Patatas Bravas @ “El Genil”, C/Jardi nº77, Vilanova i la
Geltrú, Barcelona.
Para
muchos el principio de las famosas patatas bravas de Vilanova, para otros la tradición
aburrida de las mismas. Un lugar que se ha ido modernizando con los años y que tiene
a su clientela fija que sí o sí se pasará caiga quien caiga, fieles hasta la
muerte. Pero como dice la leyenda todo empezó con ellos, ¿por qué no tenemos
ese sabor de boca que lo justifica? Las patatas ya no parecen ser las que
usaban antiguamente crujientes y sabrosas, ahora son sabrosas… crack!, la salsa blanca, una mayonesa aguada muy
adecuada para este plato y su picante peculiar,
se pierden por culpa de la cocción de las patatas. Un lugar que hay que
visitar para comprender la tradición del tapeo de la ciudad, pero que para mi
gusto ha perdido con los años y se ha quedado atrás. La ración sale por unos 6,00€,
y las puedes acompañar con una alta variedad de tapas y bebidas.
“El Giraldillo”, C/ del Pelegrí Ballester
nº19-21, Vilanova i la Geltrú.
Patatas Bravas @ “El Giraldillo”, C/ del Pelegrí Ballester
nº19-21, Vilanova i la Geltrú, Barcelona.
Si
la leyenda no se equivoca son familiares del “Genil”… pero como no me la quiero
jugar no lo voy a afirmar. Según cuentan ya hace muchos años se separaron para
abrir este establecimiento, asimilando la variedad de tapas de sus familiares
siendo casi al 100x100 iguales, con la diferencia de contar con un
establecimiento mucho más grande. En mis visitas a la ciudad este era un
establecimiento donde sí o sí tenía que ir a comerme las patatas bravas y donde
sí o sí siempre acercaba a algún conocido mío para sorprenderles con las
mismas. Pero desde hace unos años lo he dejado de hacer por la misma razón por
la que no me sorprendieron las bravas de sus familiares, a mi parecer han
perdido ese toque cariñoso con las mismas. Siempre están a tope de clientes que
siguen fieles a ellos, pero lo único que me hace volver es esa salsa que sigue
con el sabor que recuerdo de la infancia cuando mis padres me llevaban a satisfacer
mis llantos de hambre. Las patatas han perdido la gracia, pero la salsa es la
que verdaderamente me saca una sonrisa. La ración sale a unos 6,00€ y la
variedad de productos que tienes para acompañar es infinito.
Una
cosa es segura, si vais a Vilanova i la Geltrú y no caéis en algunos de estos
lugares, “El Genil” o “El Giraldillo”, os perderéis una experiencia muy grata
para el paladar, pero si queréis cambiar un poco de lo tradicional y sorprender
un poco con un cambio que no os dejará indiferentes, acercaros a “Sa Calma” con
sus vistas y buena localización, o a “La Chata” donde su personalidad os dejará
sorprendidísimos!