Vinateros 28, Camino de los Vinateros nº28, Madrid.
Después de tomarte tres cafés y
dar vueltas con la moto por Madrid disfrutando de un sol de escándalo buscando
restaurantes para visitar, siempre se agradece terminar en uno que te miman
como si te conocieran desde siempre.
Restaurante "Vinateros 28" @ Camino de los Vinateros nº28, Madrid.
En el Camino de los Vinateros nº
28, nos encontramos el Restaurante Vinateros 28, un nombre más que elocuente
para no olvidarnos de su dirección. Antes de entrar me he tomado la libertad de
dar una vuelta y comprobar un poco la zona para saber donde estoy y a que me
enfrento. Me sorprende que no hay competencia directa, ya que todos los otros
restaurantes son de comida rápida o de un nivel más bajo.
Zona Barra @ Restaurante Vinateros 28, Camino de los Vinateros nº28, Madrid.
De vuelta al local y como tenía
que esperar a mi acompañante, he decidido tomarme un café con leche en la
terraza para ver como se desenvolvían con los clientes que ya tenían rellenando
el espacio exterior. El trato que he podido observar desde un inicio ha sido
muy cercano con todos los que estábamos fuera, tanto con los clientes ya
conocidos por ellos como los que acabamos de aterrizar.
Una vez mi acompañante ha
llegado, nos hemos acercado a la mesa que tenían para nosotros en el interior,
una zona acogedora y agradable que estaba a rebosar de clientes que parecían
conocer a la perfección sus platos estrella.
Para no complicar las cosas y
facilitar una buena primera impresión, hemos dejado que nuestro camarero eligiera
por nosotros.
Para empezar nos han ofrecido un
vino blanco ideal para el día tan caluroso que hemos tenido. La elección un “Valdesil Godello Sobre Lías”,
un vino intenso con un final largo y amargo que ha añadido frescura al tema.
"Valdesil Godello Sobre Lías" @ Restaurante Vinateros 28, Camino de los Vinateros nº28, Madrid.
Una vez hemos dado el primer
sorbo a nuestro vino ha llegado el primer plato, una “Ensaladilla Rusa con Ventresca de Atún”, la presentación sencilla y los elementos
justos para no marear ni a la vista ni al paladar. Muy fina y elegante.
"Ensaladilla Rusa con Ventresca de Atún" @ Restaurante Vinateros 28, Camino de los Vinateros nº28, Madrid.
Antes de terminar con la
ensaladilla, nos han dejado al lado unas “Croquetas de Gambas y Almejas”, un
rebozado muy fino y un sabor muy alegre y diferente. Para mi gusto la bechamel
estaba un poco espesa, pero una vez lo saboreas eliminas este pensamiento y te
fijas solo en el sabor.
"Croquetas de Gambas y Almejas" @ Restaurante Vinateros 28, Camino de los Vinateros nº28, Madrid.
La tercera elección ha sido un
“Queso de Cabra a la Plancha con Mermelada de Tomate y de Cebolla”. Un plato
ideal para estas fechas y para algunos un poco aburrido… probarlo con la
mermelada de tomate y de cebolla y me contáis.
“Queso de Cabra a la Plancha con Mermelada de Tomate y de Cebolla” @ Restaurante Vinateros 28, Camino de los Vinateros nº28, Madrid.
Una vez devorado el queso, unas
“Chips de Berenjena con Salmorejo” han aterrizado en frente nuestro. Unas
berenjenas rebozadas y sin nada de aceite, si si, sin nada de aceite.
"Chips de Berenjenas con Salmorejo" @ Restaurante Vinateros 28, Camino de los Vinateros nº28, Madrid.
En este
punto he tenido que comentar con nuestro camarero que siempre que las intento
hacer en casa me salen bañadas y empapadas en aceite, con lo que me ha contado
la técnica para poder cocinarlas correctamente sin que me ocurra eso. Quien quiera
saberlo que se lo pregunte, eso sí, el salmorejo donde bañábamos las berenjenas
lo he encontrado un poco ácido, nada alarmante pero me hubiera gustado más que
no lo fuera.
De repente y sin avisar ha pasado
por delante nuestro un “Arroz con Bogavante” de escándalo… pero eso, ha pasado
por delante.
"Arroz con Bogavante" @ Restaurante Vinateros 28, Camino de los Vinateros nº28, Madrid.
Al ver la cara de bobo que se me
ha quedado ha tenido el detallazo de acercarme una tapita de “Arroz con
Vegetales” que han cedido otros clientes para saciar mis ganas de arroz. El
grano en su punto y el sabor fuerte y dulce. Muy agradable al paladar.
Tapita de "Arroz con Vegetales" @ Restaurante Vinateros 28, Camino de los Vinateros nº28, Madrid.
Terminados los entrantes hemos
empezado con tres elecciones excelentes para terminar la visita.
La primera han sido unos
“Saquitos de Huevos de Corral con Boletus y Trufa”. Suena bien, ¿ no ? Pues
sabe mejor.
"Saquitos de Huevos de Corral con Boletus y Trufa" @ Restaurante Vinateros 28, Camino de los Vinateros nº28, Madrid.
El huevo envuelto en filo, con una salsa de boletus espesa y con el
aroma final de la trufa hacen que te den ganas de petar el huevo y mezclarlo
todo para mojar pan… me ha dado vergüenza hacerlo, pero os animo a que lo
hagáis sin reparo.
"Saquitos de Huevos de Corral con Boletus y Trufa" @ Restaurante Vinateros 28, Camino de los Vinateros nº28, Madrid.
La segunda, un “Bacalao con
Txangurro” de olé. Para los que me seguís de hace tiempo sabéis de mi debilidad
por este pescado. Hay que hacerlo muy mal para que lo critique. El pescado como
siempre estupendo, y el Txangurro me ha sorprendido. Una mezcla divertida.
"Bacalao con Txangurro" @ Restaurante Vinateros 28, Camino de los Vinateros nº28, Madrid.
Y ya para acabar, un “Rabo de
Toro” sin preocupaciones. Digo sin preocupaciones porque me molesta mucho el
estar rebañando el hueso y apartando los cartílagos, lo hacen ellos por ti en
la preparación del plato. Te lo sirven limpio y desmigado para que no tengas
que dejar nada en el plato. Muy buen sabor y la carne tierna como debe de ser.
"Rabo de Toro" @ Restaurante Vinateros 28, Camino de los Vinateros nº28, Madrid.
Para los postres ya no quedaba
espacio así que hemos pasado, aunque por lo que me han comentado que tienen un
“Crujiente de Almendras con Mascarpone y Fruta de la Pasión” de escándalo, pero
esto ya os lo dejo a vosotros para descubrir.
La visita ha sido muy agradable
de principio a fin, con una atención cercana y amigable sin peros ni contras.
El mismo dueño del establecimiento ha sido nuestro camarero y seleccionador de
los platos, cosa que dice mucho de él.
Ya al terminar lo he interrogado
un poco y he podido ver como disfruta de su profesión y de su establecimiento. Una
larga carrera en restaurantes de nombre en Madrid lo apadrinan.
Una experiencia para repetir.
( 35.00€ aprox. persona )
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